Milenario yacimiento de obsidiana

diciembre de 2008
Vestigios de algunos objetos que, con obsidiana verde dorado, fueron elaborados en las inmediaciones de Las Minillas

Epazoyucan, Hidalgo.-En la Sierra de las Navajas y en la cima del cerro más alto del estado de Hidalgo, a una altitud de 3 mil 180 metros sobre el nivel del mar (msnm), se localiza el yacimiento más importante de obsidiana que, de acuerdo con historiadores y arqueólogos, se ha explotado desde 9 mil años antes de nuestra era.El lugar preciso se denomina Cerro Cruz del Milagro, ubicado en los límites de la comunidad El Nopalillo, municipio de Epazoyucan, donde también se localizan, casi a cielo abierto y a 2 mil 700 msnm, pozos, tiros de mina y bocaminas de Las Minillas, algunos nuevos y otros que son vestigios de la explotación que se realizaba en la época prehispánica.El yacimiento de obsidiana del Cerro Cruz del Milagro y de Las Minillas, principalmente la color verde dorada, alcanzó una gran distribución entre los pueblos mesoamericanos, pues se hallaron restos de instrumentos elaborados con este material volcánico vidrioso en Guatemala, Honduras, El Salvador e incluso, al parecer, en la cultura Inca, en Perú.Es en una superficie de 150 hectáreas donde se ubican los yacimientos de obsidiana de la Sierra de las Navajas, de las cuales 12 hectáreas corresponden a la cima del Cerro Cruz del Milagro y Las Minillas. "Aquí pueden observarse vestigios de la explotación que hicieron los teotihuacanos, texcocanos y aztecas. Hay pozos, tiros de mina y bocaminas nuevos, pero igualmente otros azolvados y cubiertos por maleza del lugar que datan de la época prehispánica", comentaron vecinos de El Nopalillo y de Epazoyucan.Señalaron que instrumentos de obsidiana extraída de esta zona de Hidalgo, según citan arqueólogos, se asocian con restos de mamut, "siendo el caso más conocido el descubrimiento de Santa Isabel Ixtapan, como lo describen libros de historia", indicaron.La obsidiana, por sus características físicas, desde siempre ha sido buscada y explotada con el propósito de elaborar tanto utensilios como objetos suntuarios. "En las culturas prehispánicas el uso de la obsidiana fue de enorme importancia, tanto en actividades económicas como políticas y religiosas", explicó Juan Carlos León Pineda, vecino de la cabecera municipal de Epazoyucan.Agregó que de acuerdo con investigaciones realizadas en torno a este material sacado de las entrañas del suelo hidalguense, del Cerro Cruz del Milagro y de Las Minillas, "se han encontrado puntas de proyectil, cuchillos ceremoniales, lanzas, figurillas pulidas y talladas, vasijas, hachas, perforadoras, pectorales, espejos, navajas y otros instrumentos que elaboraron, sobre todo, artesanos teotihuacanos, pero también de Texcoco y Tenochtitlan", indicó.Señaló que el uso de la obsidiana, tan importante entre los pueblos prehispánicos de México y de Mesoamérica, fue reducido considerablemente durante el periodo colonial, debido a que los españoles la sustituyeron por metales.


ELABORACIÓN DE ARTESANÍAS


En la actualidad, la obsidiana extraída de Hidalgo es utilizada en la elaboración de artesanías, ubicándose los principales talleres en el municipio de Teotihuacan, Estado de México, desde donde se distribuyen infinidad de figuras y objetos diversos a todo el país e incluso al extranjero.Cerca de los yacimientos de obsidiana, a escasos 300 metros de distancia, en la comunidad El Nopalillo, se localizan dos talleres artesanales, uno donde se elaboran objetos de gran calidad y belleza, y otro donde se sigue la tradición de construir puntas de lanza, cuchillos y pequeñas figuras que comercializan entre los visitantes."Al igual que en la época prehispánica, donde los mayores centros de consumo de obsidiana hidalguense eran Teotihuacan y Tlatelolco, en la actualidad se siguen comercializando grandes bloques, en su mayoría color verde dorado, para elaborar la artesanía que se distribuye en centros turísticos del país", comentaron ejidatarios del lugar.Resaltaron que la venta de obsidiana representa una fuente de ingresos para sus familias, "pero también estamos impulsando un desarrollo ecoturístico para que visitantes locales, nacionales y extranjeros, además de conocer tan importante lugar histórico y arqueológico, disfruten de una convivencia con la naturaleza", exteriorizaron.Los yacimientos de obsidiana se ubican entre caminos de terracería y brechas boscosas y arbustadas que conducen a la cima del Cerro Cruz del Milagro, donde se sitúa un mirador de aproximadamente 15 metros de altura, construido en madera, desde donde se dominan los valles de México y Tulancingo, así como más de 20 municipios del estado de Hidalgo.


OTROS YACIMIENTOS


Es evidente la importancia que tuvo para las culturas mesoamericanas la obsidiana, por lo que, además de los yacimientos explotados en la Sierra de las Navajas, en Hidalgo también se localizan otros en los municipios de Zacualtipán, Metzquititlán, Tulancingo, Cuautepec, Santiago Tulantepec y Huasca de Ocampo.En el interior del país, igualmente se localizan yacimientos de obsidiana en Querétaro, Guanajuato, Jalisco, Nayarit, Michoacán, San Luis Potosí, Tamaulipas, Guerrero, Oaxaca y en la cuenca oriental que comprende Puebla, Tlaxcala y Veracruz.Asimismo, se encuentran zonas de explotación en Guatemala, Honduras y El Salvador, pero en ninguna se obtiene la de color verde dorado, característica de la extraída en el Cerro Cruz del Milagro, ubicado en la Sierra de las Navajas.

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